El apego es definitivamente importante para un bebé puesto que le ayuda a formar su seguridad, autoestima, confianza, entre otras cosas. Pensemos por un momento en el reino animal, especialmente en los primates. No quisiera generalizar pero son los más cercanos a nosotros ya que se separan físicamente de sus crías hasta que éstas se dejan de amamantar y obtienen la capacidad de locomoción independiente, es decir, hasta que son capaces de desplazarse por sí solos.
En cambio, los seres humanos modernos tratamos de separarnos de nuestros hijos a muy temprana edad con la idea de no acostumbrarlos a los brazos. No es necesario decir si esto es lo correcto o no, cada madre sentirá si su nivel de angustia le permite o no separarse de su criatura antes de que ésta se pueda mover por si sola. Criar con apego no es perjudicial y tampoco estás haciendo a tu hijo dependiente de ti. Veamos una situación lógica:
Los chimpancés y los humanos compartimos el acto reflejo de presión, esto sucede cuando los bebés o chimpancés cierran las manos con fuerza. Dicho acto les sirve a los chimpancés para asirse del pelaje de la madre y no caer al vacío. Las madres a su vez, los ayudan a mantenerse agarrados de ellas hasta que estos son capaces de desplazarse solos. Si bien los humanos hemos perdido el pelaje y nuestros hijos ya no se pueden asir a nosotros, no significa que no necesitan permanecer cerca del regazo de la madre. Nuestros bebés siguen necesitando el contacto físico, al igual que las crías de los chimpancés, por eso al soltarlos se sienten inseguros y lloran, en cuanto vuelven a sentir que están en brazos se calman.
La vida moderna nos ha llevado a querer espacios para nosotras mismas y a recuperar lo antes posible nuestra independencia después de que hemos parido, de hecho algunas mujeres sienten la necesidad urgente de volver a su vida profesional y social cuando sus bebés aún se encuentran en etapas muy tempranas, y está bien hacerlo si esto no te genera angustia o una lucha interna entre si es bueno o no despegarse del bebé. Sin embargo, si te sientes muy abrumada por alejarte de él, te recomiendo hacerle caso a tu instinto y permanecer más tiempo con tu pequeño, recuerda que criar con apego es bueno y tiene beneficios para tu pequeño.
Hoy en día se vuelve todo un reto criar con apego porque es ir en contra de los valores de la sociedad moderna, pero no te desanimes, busca a otras madres con ideas similares a las tuyas y formen grupos para compartirlas, recuerda que criar en red es más llevadero que hacerlo sola.
Para las mamás que desean educar con apego y quieren tener más razones para hacerlo, les sugiero apelar a nuestra propia naturaleza y para eso les dejo estos links con el fin de apoyarlas en su decisión de criar con este método y para que saquen sus propias conclusiones.
En el momento en que Harlow separaba a las crías de chimpansee de las madres y las llevaba a nuevos contextos, comenzaban a mostrar síntomas de ansiedad: lloraban, gritaban, se chupaban el dedo y buscaban objetos suaves como su madre. Cuando las volvía a depositar en la jaula original en la que estaba la madre de felpa, las crías se iban directos a ellas y permanecían inmóviles a su lado, reticentes de abandonarlas… Este fragmento fue tomado de 'Harry Harlow: Un estudio sobre el apego' del blog 'No sólo Freud'.